domingo, 28 de junio de 2015

EL PODER JUDICIAL QUE NECESITAMOS

EENDDTP


Fuente de esta imagen: http://xurl.es/7ciuw


Hoy voy a someter a su consideración mi visión del mas controvertido, delicado e importante de los Poderes públicos Nacionales: EL PODER JUDICIAL, de cuyo celo y vigilancia depende el Estado de Derecho. 

Con el propósito de encontrar la fórmula o manera que racionalmente se acerque más a la obtención de un Poder Judicial liberado de los intereses político partidistas que hasta el presente han hecho desconfiable la administración de justicia, he emprendido la tarea, con el asesoramiento de destacados profesionales del Derecho Constitucional, de buscar y encontrar la causa real que no nos ha permitido gozar de un sistema judicial que a la vez de guardián del sistema democrático, vele por la integridad y correcta aplicación de la Constitución, del normal funcionamiento de las otras Ramas del Poder Público Nacional y de la eficacia y equilibrio de las Instituciones del Estado, que tienen bajo su potestad importantes áreas de los derechos y garantías del ciudadano y de la sociedad en su conjunto.

¿Dónde está el factor contaminante del sistema judicial? Sin lugar a dudas en su fuente genésica. Es del conocimiento publico que los Magistrados judiciales son escogidos por los representantes de los partidos políticos en la Asamblea Nacional (antes Congreso) según un criterio político partidista con los resultados que todos conocemos y que están a la vista. Resulta entonces evidente que a los partidos políticos hay que excluirlos de esta función. Para erradicar esta inveterada aberración, que no permite la independencia y autonomía de los jueces, se precisa cambiar el método de selección y nombramiento. Mientras más lejos esté la política y los partidos de la justicia ... mejor para todos, inclusive, para los propios partidos políticos.

Es imperativo encomendar la función de seleccionar el grupo de ciudadanos de donde saldrán los futuros Magistrados con probada capacidad para el desempeño del oficio y de indiscutida probidad para merecer la confianza ciudadana, no a unas instituciones políticas por muy democráticas que ellas sean, sino a una entidad ajena a las pasiones, preferencias o compromisos con valores circunstanciales que, por su misma naturaleza, están conectados con factores materiales e ideológicos que no representan a la totalidad social, ni al fin, armonía y justicia que persigue el Estado.

Con fuerza en estas razones he decidido, previo asentimiento de mi equipo asesor, proponer una fórmula y un procedimiento que, ponderando factores y circunstancias diversos, nos conduzca a lograr un Poder Judicial confiable, creíble y estable.

El nuevo Poder Judicial propuesto deberá comprender dos niveles. Un primer nivel representado por un Tribunal Constitucional, destinado a garantizar la vigencia plena de la Constitución de la República, con poder suficiente para anular cualquiera norma jurídica y formal dictada por el Poder Legislativo (o de cualquiera otro origen) que la contraríe. Siendo además, su intérprete final con plena facultad para decir y establecer que es ley; y su concepto será inapelable. Teniendo además las siguientes atribuciones:
  • Juicio al Presidente de la República
  • Demanda de nulidad contra tratados o convenciones internacionales
  • Demandas contra la República por gobiernos extranjeros
  • Tomar juramento al Presidente de la República

Este Tribunal Constitucional, por su naturaleza y fines, deberá estar ubicado fuera del Sistema Judicial Ordinario e integrado por siete (7) Magistrados políticamente independientes, mayores de sesenta (60) años de edad, que gocen de alta consideración moral, que reúnan las condiciones para el ejercicio de cargo de tan alta y delicada responsabilidad y que sean jurisconsultos de reconocida competencia en la disciplina del Derecho Constitucional. Las personas adecuadas para  tan alta responsabilidad deberán ser seleccionadas por la Academia de Ciencias Políticas y Sociales, en número no inferior al triple de los integrantes de ese Alto Tribunal, de los cuales el Congreso de la República escogerá los siete (7) Magistrados que integrarán el Tribunal Constitucional, quedando el resto como suplentes. La permanencia de los magistrados en el cargo dependerá de su probidad y desempeño, no pudiendo prolongarse más allá de los ochenta (80) años de edad. Cada vez que sea necesario, la Academia de Ciencias políticas y Sociales hará nueva selección para mantener el número de magistrados potenciales, que será cursada al presidente del Congreso de la República.

El Segundo Nivel del Poder Judicial que se propone está representado por lo que podríamos llamar la  organización tribunalicia tradicional, cuya máxima jerarquía la ostentaría una Corte Superior de Justicia, compuesta por las Salas Penal, Civil, Político Administrativa y Laboral, que funcionarían como instancia de casación en sus respectivas competencias, desapareciendo la Sala Constitucional cuyas atribuciones (en líneas generales) serán absorbidas por el Tribunal Constitucional. Y la Sala Electoral, materia que por su especificidad e importancia, pasará a ser competencia, en instancia única, del Tribunal Electoral, que tampoco formará parte del Sistema Ordinario de Justicia.

Cada una de las Salas estaría integrada por cinco (5) magistrados, observándose para su dotación similar procedimiento al utilizado para la conformación del Tribunal Constitucional. Para ser Magistrado de Sala se requerirá una edad no inferior a cincuenta (50) años y ser especialista en la materia correspondiente. Lo relativo a permanencia en el cargo y condiciones económicas se regularán por ley especial dictada por el Congreso de la República. Los demás jueces que conformarían el Sistema Judicial se proveerían mediante concurso. Para los ascensos se aplicarían elementos de objetiva comprobación: rendimiento, calidad de las sentencias, estudios realizados, conducta ciudadana y profesional y honorabilidad reconocida.

La existencia del Tribunal Constitucional propuesto, no liberará a los tribunales del Sistema Judicial Ordinario de ejercer el control difuso de la Constitucionalidad de las leyes, y demás actos normativos y de ejecución del Poder Público, puesto que esa función es parte de la Unidad del Sistema Contralor de la Constitucionalidad.

Este nuevo Poder Judicial que propongo deberá estar al servicio de la sociedad entera y realizará la justicia en la medida en que sus jueces sean honorables, sabios, prudentes y justos.


Saludo libertario: 
Ángel Vivas



¡MUERA LA TIRANÍA VIVA LA LIBERTAD!
GENERALÍSIMO DE MAR Y TIERRA DON FRANCISCO DE MIRANDA
2 DE FEBRERO DE 1806



DDLEEUQOM

16 comentarios :

  1. Dios quiera algún día veamos aplicado este proyecto en nuestro país, necesitamos una justicia que no este politizada.....

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    1. todo está masonado fin civilizatio, en Spain EN SEDE JUDICIAL Y TRIBUNAL hasta se puede mentir IMPUNE o hacer denuncia falsa Y RARO TE JODAN, no asi en USA donde cuidan lo suyo, al resto que lo desquicien

      http://kaoshispano.blogspot.com/2015/07/sobre-la-exhortacion-pastoral-de-los.html

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    2. Buenas tardes General.
      Creo que lo planteado por usted se ajusta a un mejor poder judicial, sin embargo en lo referente a la elección final desde la terna de Magistrados propuestos la decisión de los que conformaran este tribunal debería recaer en la población que sera afectada por ellos en elecciones libres y luego de los resultados públicos la asamblea procedería a su nombramiento.
      De igual manera debería incluirse en ley especial la evaluación de funciones de estos magistrados por parte de la asamblea y cuyos resultados podrían afectar directamente, en todos lo ámbitos, al magistrado evaluado.

      Saludos y un abrazo

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  2. Desconozco esta materia, pero me parece muy importante que se investiguen y se juzgue todo el tren ejecutivo actual y todos los que han pasado. Directores de hospitales, Presidentes de corporaciones de salud de cada estado, revisión de bienes nacionales...! Barrio Adentro,etc . Muchas personas han pagado con su vida y en especial CICPC. Cuna de mafias con uniforme.En especial en el Edo. Anzoategui que apresar de que gobiernos van y vienen no avanzamos.

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  3. Me parece interesante la actitud de querer proponer una justicia mas justa, valga la redundancia, si la hay.
    La crítica que haría es la necesidad de incorporar en su equipo al menos un teólogo siendo que la justicia verdaderamente perfecta proviene de Dios, no del hombre.
    Aprovechemos la oportunidad que somos conocedores de la Biblia o sea cristianos, para hacer un basamento de todos esos principios jurídicos.

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    1. Buen día Sr. Caballero, ciertamente lo que Dios provee es perfecto, pero incorporar la teología, beneficia en la guía espiritual que puede proporcionar al aspecto de la justicia. No olvidemos que la "justicia debe ser ciega"..., aunque ésto es más utópico que realista, ya que ante tanta atrocidad, esa "ceguera" es casi imposible de mantener. Yo pues creo que todo elemento que se involucre en la creación de un texto adecuado, aplicable y justo, es necesario para poder avanzar como sociedad civilizada hacia los retos futuros. Saludos

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  4. Buenas tardes Gral.
    Veo con alegría, que sigue Usted activo y “en marcha”, que como bien dicen por los EE UU, animando a alguien, cuando está haciendo un buen trabajo, también yo le animo y le digo: ”Keep on trucking mi Gral.”…,
    Ha propuesto Usted el estudio y análisis del tema clave y fundamental, como lo es, la conformación de un nuevo Poder Judicial que, dentro de los Poderes del Estado, este es, del que dependerán todas las demás emanaciones de los demás poderes del Estado, para que en el desempeño de sus funciones, estas, estén sujetas al derecho establecido y sometidas al imperio de la Ley.
    Será el Poder Judicial, el ente principal, como único garante en la administración de una justicia imparcial, independiente y digna, que por su fundamental sentido en una escala de prioridades, se convierte en el factor prioritario y primordial a establecer, para emprender la ardua tarea que va a suponer la reconstrucción total de nuestra destruida República.
    Yo no soy ningún experto en la materia, pero si soy un agudo observador y crítico por consecuencia, de los efectos que se producen en cualquier sociedad, en la aplicación de las leyes sobre sus gentes, donde se podrán apreciar siempre los síntomas de probidad y equidad o de abuso e injusticia, cuando ese Poder Judicial, demuestre ser independiente y libre o sometido y parcializado, respectivamente, en las sentencias que dictamine.
    Verá mi Gral., estoy cansado de ver con tristeza, cómo aquí en España, en esas especiales ocasiones en las que el interés político es “insalvable”, se vulnera la Ley, su espíritu y su esencia, de manera vil y asombrosa, con sentencias escandalosas de excarcelaciones y absolución de verdaderos asesinos, como los de la eta, o condonaciones de condenas y sobreseimientos a delitos de estafadores, defraudadores y ladrones de “cuello duro”, pero con mucha “trayectoria” en la más que próxima relación, con las cúpulas de los principales partidos políticos. Que como es de suponer, ese “maridaje” supone al final, una complicidad, en la que se impone taparse mutuamente sus “vergüenzas” entre los “unos” (políticos y jueces corruptos) y los “otros” (toda clase de personajes corruptores).
    Y es que he llegado a la conclusión, que cuando se dejan “atajos” o “limbos” en la redacción de los textos de las leyes, o se dé pié a la ambigüedad en la que se pueda tergiversar la superioridad de un Poder sobre otro, siempre existirán esos juristas o magistrados, muy “afines” o “simpatizantes” a tal o cual partido político, de los que suele echar mano el Poder Legislativo cuando le convenga una determinada sentencia sobre un determinado caso, en los que esté oscuramente involucrado, para que estos jueces y magistrados, se encarguen del tal caso espinoso y le dan esa especial y rebuscada “interpretación” de la ley, que logre una sentencia a su favor, “doblándole el brazo” a la Ley o “retorciéndola”, para complacer a tal o cual interés político del Gobierno de turno.
    Por tal razón, y si pueda servir de algo mi humilde opinión, en la meditación y análisis para la conformación de los dos niveles que yo, al igual que Usted, también considero acertado y necesarios dentro del Poder Judicial, como lo son el Tribunal Constitucional Y la Corte Superior de Justicia, en donde creo que, podría estar representada por los Juzgados Ordinarios con sus correspondientes salas representativas de todas y cada una de las diversas competencias de actuación, que Usted enumera. Pero pienso, que por encima de todos ellos, debería de estar un Tribunal Supremo, como tribunal de última instancia en los casos de sentencias emitidas en Tribunales Ordinarios, en las que quepa apelación de tal o cual sentencia.

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  5. Yo pienso que el Tribunal Constitucional, solo debe tener competencia y suficiente poder para discernir y sentenciar, como muy bien Usted propone para: “anular cualquier norma jurídica y formal dictada por el Poder Legislativo (o de cualquier otro origen), que la contraríe”.
    Pero sin competencia para poder enmendar o tumbar sentencia alguna emanada del Tribunal Supremo, ya que, si La Constitución, las leyes y sus artículos son creados por el Constitucional, para ser el legado para las competencias de los tribunales Supremo y Ordinarios, sería una contrariedad que estos a los que se les otorga la potestad de impartir justicia en base a la Constitución y a las leyes que se les den, el mismo Tribunal Constitucional que se las da, pueda interferir en sus sentencias. Para lo cual y como seguro de garantía efectiva, de la aplicación de un mismo espíritu y una misma esencia, la Constitución y la Ley, estará basada, establecida y radicada, en la imposición total y absoluta de “NO PODER SER INTERPRETADA” por nadie ni por nada. Ateniéndose en todos los casos, al significado estricto de la palabra escrita, sin cabida a insinuaciones ni indefiniciones ni circunloquios farragosos. El articulado de toda Ley, cuantos más escueto y preciso, más fácil de entender y de aplicar y menos posibilidad de intentar “interpretar”.
    Lógicamente, para la actualización de la Ley y el anexado correspondiente de nuevas leyes que sean necesarias para complementar los vacios legales que puedan surgir, está lo que se llama Jurisprudencia, como canal, no de “interpretación” de la Ley, sino de racionalización de la misma, en los casos en que amerite su incorporación con los nuevos artículos que la tipifiquen.
    Hago esta exposición de mi supuesta comprensión del tema, ya que lamentablemente, aquí en España, se ha dado el triste caso, en el que el Tribunal Supremo dicto una sentencia totalmente ajustada a derecho y sustentada por unanimidad, después de varias apelaciones de la misma sentencia emitida en los Tribunales Ordinarios y vino el Tribunal Constitucional a tumbarla por darle una “interpretación” distinta a la letra del artículo en que se basaba dicha sentencia, dejando al Supremo y a sus magistrados en ridículo y a la altura del betún, al tener que ceder y doblegarse a los magistrados de un Tribunal que se entiende que no está para juzgar a nadie, sino para tutelar y vigilar que no se vulnere ni transgreda ningún artículo de la Constitución.
    Estaré atento al devenir de esta interesante iniciativa que Usted ha propuesto, con todo el acierto y sentido común que realmente amerita.
    Reciba como siempre un cordial saludo de mi parte, cuídese mucho y recuerde, que no está solo.


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  6. Muchas gracias a todos por sus comentarios, sus opiniones y recomendaciones serán consideradas por el equipo multidisciplinario que me esta ayudando en este proyecto. Gracias Carlos Espadas por el especial interés que le has puesto para colaborar en este proyecto que en definitiva pertenece y es del interés de todos los venezolanos de bien. Saludos.

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  7. Del sistema de tribunales no se nada, solo se que los presos deben trabajar para la República y así beneficiarce de mano de obra barata.

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  8. Buenas tardes
    Gral. No se mucho de leyes, pero lo que usted plantea, es una idea muy buena, pero yo pienso al igual que la mayoría de los Venezolanos, para cambiar todo este desastre político, primero se debería de contratar personal no muy mayores de edad, ya que las personas mayores de edad que están en la Asamblea Nacional, NO HACEN NADA, segundo, este hermoso país llamado Venezuela, al cual la mayoría quiere, y se niega a perderlo, como yo, fue liberado por nuestro querido Simón Bolívar, reclutando CAMPESINOS, los cuales no sabían disparar un arma, pero nuestro Libertador, les enseño, y aquel que lo traicionara, era eliminado de sus filas militares, tercero, muchos venezolanos están de acuerdo con la pena de muerte, esta pena se podría llevar a cabo mediante un referéndum, o a través de la consulta popular, como las elecciones presidenciales, creo que se ganaría con un 90%, de esta manera se acabaría mucho las matanzas, violaciones, secuestros, y la corrupción bajaría a un punto muy infinito.
    Mi opinión, para salvar a este país, es que todo vuelva a hacer como antes, y que todas las administraciones públicas, sean administradas por un ente privado y de confianza, así como el otorgamiento de las divisas, las cuales no se pueden liberar del todo, mientras estemos en este caos, pero si se podría reunir con los diferentes y pocos aparatos productivos que están en el país y hacerles una simple pregunta que sería la siguiente ¿Cuánto necesita usted anual para mantener a la empresa al 100% de su operatividad? y de igual manera, darle las divisas a las personas pero cada cuatro (4) meses, obviamente, habría que estudiar cuanto.
    Yo pienso que con mi humilde opinión junto a sus ideas, podrían hacer mucho, ya que de esta manera se activaría la economía, se eliminaría la delincuencia, y todos seriamos felices, ya que podríamos acabar con los barrios, y la pobreza.
    P.D.: No deberíamos de dejar ir a los actuales gobernantes, alcaldes, magistrados, entre otros, ya que ellos tienen grandes cantidades dinero afuera, suficientes como para pagar todas las deudas que se deben a otros países, y las internas, Venezuela podría convertirse en un Dubai y en un E.U.A, el cual nunca nadie podrá derribar, ya que esta estructurado bajo las leyes masónicas.
    Buenas tardes Gral. y disculpe si en algo fallo, hasta pronto.


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  9. En mi modesta opinion creo que tiene razon en muchos punto, pero quisiera añadir una propuesta, a los jueces hay que seleccionarlos primero con una investigacion de antecedentes, un concurso de credenciales y mediante un concurso oposicion, moderado por el Colegio de Abogados y representantes de organismos internacionales, que sea abierto al publico y asegure que las personas mas idoneas sean escogidas, en un concurso oposicion se enfrentan los postulantes unos a otros, escogiendose los oponentes por sorteo, cada uno por turno debe proponer un problema a su oponente y este debe dar una solucion demostrando su conocimiento de la ley y el derecho, los moderadores otorgarian puntos y al final los que demuestren mayor conocimiento serian electos.

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  10. Gral... y ya que estamos hablando de Leyes... una norma que debería aplicar es que si un MENOR cometiese algún delito sus PADRES deberían ir presos al igual que el menor... Es responsabilidad hasta los 18 años de edad la Educación y buenas costumbres de los hijos, por ello si no lo hiciere deberían ser penalizados.

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  11. Recomendación bibliográfica sobre su artículo "EL ESTADO QUE QUEREMOS":

    Movimiento de Ciudadanos hacia la República Constitucional
    https://mcrcalicante.wordpress.com/

    ANTONIO GARCÍA-TREVIJANO
    http://antoniogarciatrevijano.com/

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  12. Lo primero que se debe hacer es una ley de pena de muerte juzgar y capturar a todos los que tanto daño han ocasionado en estos 16 últimos años de esta tirania y que paguen por los muertes impunes los que hoy están gobernando no se a podido ver hecho tanto daño en tan poco tiempo, luego embargar y bienes cuentas a todos los que han robado en los últimos 40 años de democracia, veneZuela como país debe de recuperar y dar ejemplo al mundo de integridad y honestidad, recuperar esos valores escénciales de moral y civismo que en democracia libre se aplican, la justicia siempre en postguerra se aplica como ejemplo para no volver a cometer los errores y los culpables al la cámara de gas y eliminarlos hay que limpiar el país de mediocridad

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  13. Buenas noches General, es viable esa proposición sería como ocurre en España, pero ahora bien, me pregunto como serían elegidos los de inferior categoría? pues hoy en día lo son a dedo, los concursos de jueces desaparecieron desde el año 2003, así que igual importancia tienen los de arriba como los de abajo. Yo opto a que todos sean escogido por elección popular, es decir, por el pueblo como en EEUU.

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